Desde el retiro

A más de un año de que el primer caso de COVID 19, enfermedad causada por el virus SARS COV 2 llegara a tierras mexicanas, hemos visto transitar a gobierno y sociedad por un innumerable cúmulo de errores en el manejo de la pandemia, por desinterés, por minimizar el riesgo a la salud, por ser omisas las autoridades que debieron asumir la tarea desde un inicio para contener y controlar una enfermedad que en cifras oficiales cobra más allá de los doscientos mil muertos y contando.

No es hacer un recuento del mal manejo, pero si enfatizar en que la falta de información, el deseo protagónico y sobre todo una actitud soberbia de quien desde el ramo de la salud debió haber advertido sobre lo que venía o en su defecto en un acto de humildad dimitir ante la incapacidad de manejar esto de forma eficiente.

Sea como sea al Titular del Ejecutivo se le presentaron cifras alegres, información sesgada lo cual lo exhibió en medios como al menos poco enterado de la situación, al incentivar a que se siguiera el consumo de alimentos en calles, que se paseara por pueblos mágicos, todo esto y como lo escribía en una columna anterior “El Mandatario está solo”, debido a que sus equipos cercanos no pueden, no saben o no quieren abordar con el temas de profundo peso para el devenir del país.

Reza una frase popular que para que cualquier empresa (entendiendo empresa como actividad o conjunto de ellas a realizar) funcione, siempre será necesario estar rodeado de los mejores y que esos mejores sean capaces de hablar con verdad y veracidad sin miedo a contradecir al líder que está llevando el destino del barco; cabe parafrasear para mejor entender que una Embarcación tiene un solo Capitán sin embargo existe un piloto de la misma, un Jefe de Máquinas un Jefe de Cubierta y así hasta cubrir todas las necesidades del navío para su adecuado funcionamiento y es ahí donde en este Barco llamado México fallaron los encargados de gestionar una emergencia nacional de salud.

Primero desde la logística para adquirir Equipo de Protección Personal en calidad y suficiencia para el personal de Salud, Trajes u Overoles Tyvec, Guantes, Lentes y los ya tan famosos cubrebocas N95 y su versión oriental KN 95, entregando al inicio batas de peyon desechable, guantes quirúrgicos, cubrebocas sencillos que si bien en otras actividades estaban más que bien, ´para el personal de la primera línea era dotarlos de nada. Y aparte insuficientes.

No haber investigado a profundidad que estragos estaba haciendo el virus en el mundo y de manera coordinada buscar un plan que abordara la Salud, Economía, Salud Mental y Bienestar de Población: En lugar de eso y solo por ejemplificar anunciar de forma precipitada que tendríamos ventiladores ”sic” elaborados por instituciones educativas mexicanas sin que esto haya llegado a una realidad sino a proyectos con muy buena intención.

Y así los errores se suman y se multiplican costando vidas, al aparecer públicamente un Subsecretario pero no cualquiera, sino el Encargado de Gestionar el Tema, el que tiene el aval presidencial vacacionando, y en otro episodio cuando acorde a su dicho estaba contagiado de Covid 19 y ser todavía un transmisor eficiente con “suficiente carga viral para contagiar “dicho por el mismo, pasearse en calles de Ciudad de México. Esto le da al Mexicano diferentes lecturas y una de ellas y la más triste es NO PASA NADA, si las autoridades no se cuidan es porque esto no es tan grave. Y claro para alguien que tiene a su disposición el sistema hospitalario mexicano pues no es grave pero para el de a pie, para el Ama de casa, para el Vigilante, para el Policía, el Obrero ,el Albañil, el Oficinista por supuesto que debe extremar precauciones para no enfermar de gravedad pues no habrá camas disponibles para él o ella.

Eso nos lleva a la responsabilidad del ciudadano y es que como siempre los mexicanos nos distinguimos por ser desafiantes, teniendo sendos ejemplos de fiestas y bpdas realizadas por vedetes en plena pandemia, políticos de diferentes colores haciendo proselitismo, personas llegando a centros comerciales y restaurantes a abarrotarlos, asistir al cine olvidando los protocolos que te explican en la pantalla, saliendo de vacaciones en carros sardina, porque los hoteles están baratos ahorita y perdóneme la expresión pero es la que mas he escuchado estos días “ de algo me voy a morir”, pero no sabemos si va a ser el joven o el pobre anciano que tiene que atender una tienda para sobrevivir el que se contagie al recibir a una persona poco consciente de su responsabilidad social. Llegando a la idea del total que más da si el Subsecretario del Ramo y encargado de dirigir la Pandemia lo hizo y no paso nada, México el país de no pasa nada.

Y así el día de hoy en vísperas de la conmemoración de la semana santa hemos visto abarrotados Aeropuertos, Centrales Camioneras y un trafico inusual, si a esto le sumamos la opinión de especialistas en Virología como Lothar Wieller Presidente del Instituto Robert Koch (RKI) de Virología en Alemania, el cual recomienda para su País intensificar medidas de mitigación, limitar viajes turísticos, meter todo el acelerador a la vacunación, aun cuando ellos tienen un esquema de vacunación planeado, nos podemos dar cuenta atendiendo a las máximas de la lógica y la experiencia las lamentables consecuencias que puede haber en nuestro país con una economía informal de más del 40%, una población sin consciencia que ha comenzado a vivir como si esto hubiera sido una pesadilla, donde no todo el personal médico ha sido vacunado , donde Adultos Mayores solo cuentan con la primera dosis en algunos estados y en otros ni esa , donde se ha decidido detener la vacunación a personal de educación (maestros), en otro acto improvisado, así nos damos cuenta de la magnitud de la ola que se nos viene, quizá es la nostalgia pero recurro a otra analogía marina los países desarrollados es como si fueran porta aviones, destructores, yates de lujo y nosotros en un catamarán o quizá más cerca de ser una lancha de motor fuera de borda, así de expuestos estamos.

Sirvan estas líneas para agradecer al personal médico y de salud de la primera línea, de mediano de riesgo, privado y sobre todo al personal médico militar y naval que se han rifado durante este año como los grandes y es que coadyuvando y cuidando a la sociedad y fieles a sus principios continúan con la labor titánica de conducir y coadyuvar con las autoridades responsables en avanzar con lo que se tiene en mitigar los daños de esta crisis de salud.

El Plan DN III y el Plan Marina sin duda alguna siguen rindiendo frutos y aunque no hay creaciones personales, es sin duda alguna una creación inteligentísima de planes de emergencia para desastres nacionales.

Para terminar, quiero hacer otra reflexión, el país no se está militarizando simple y llanamente las autoridades castrenses hacen lo que han hecho siempre contribuir con su conocimiento, capacidad y don de mando para cubrir esas áreas en que las demás instituciones se muestran débiles o poco versadas ya sea atendiendo una pandemia, ya sea auxiliando en labores de seguridad pública, ya sea extinguiendo incendios forestales, ya sea construyendo un aeropuerto. Es así que desde estas letras venga un profundo reconocimiento a las Fuerzas Armadas del País.

Un favor, abracen fuerte a los suyos:

alex.cen79@gmail.com