23 de noviembre de 2020

Vecinos de Santa María Tulpetlac de Ecatepec, denunciaron la persistente escasez de agua en los últimos dos años y el secuestro de sus pozos por parte de quienes administran actualmente el sistema de agua potable de la comunidad, ya que mientras al pueblo lo mantienen bajo una absoluta sed crónica, el líquido que sustraen lo vende mediante pipas a empresas, instituciones y fraccionamientos sin rendir cuentas a nadie de las ganancias.

Estos esquemas de falta de rendición de cuentas, deficiencias en el suministro del servicio a los pobladores y la venta indiscriminada del líquido, estaría violentando los estatutos que rigen el sistema de agua de Tulpetlac, sin contar que sus propios integrantes podrían estarse moviendo al filo de la ilegalidad, al haberse elegido mediante planillas y no por voto directo, como ordena la reglamentación que les dio origen.

Onofre, Enrique, Georgina e Idelfonso, algunos de ellos fundadores del sistema de agua potable de Tulpetlac, narraron que tras el arribo de Morena al municipio de Ecatepec se esperaba que la nueva administración pudiera poner orden en los esquemas irregulares de venta de agua y sobreexplotación de pozos, pero sobre todo a la escasez del vital líquido en este poblado, sin embargo la situación no ha mejorado sino que persiste y se ha agudizado en la actual pandemia.

Explicaron que esta problemática se intensificó con la llegada hace unos años, de organizaciones de piperos y transportistas aglutinados en el llamado “Sindicato Libertad”, el cual ha entrado a la cancha y ya controla gran parte del negocio de la venta de agua con pipas en esta demarcación.

Tulpetlac es el pueblo más grande de Ecatepec, cuenta con una población cercana al millón de habitantes, con alrededor de 22 colonias que surgieron de la venta de terrenos comunales y se fueron regularizando y extendiendo sobre las faldas de la Sierra de Guadalupe, hasta donde llega la frontera de este enorme pueblo urbano.

No obstante y pese a contar con varios pozos y hasta con una asociación civil que se rige con estatutos legalmente registrados, el organismo administrador del agua de Tulpetlac se ha transformado al paso de los años en una especie de empresa independiente que ya no responde a sus propósitos originales de brindar el servicio a sus habitantes, aseguró Antonio Muñoz, tras destacar que esta situación inició hace unos 15 años, pero los últimos cinco han sido los peores.

Un recorrido por el pueblo de Tulpetlac, permite constatar que en mientras en las redes domiciliarias no hay una sola gota de agua disponible, las pipas de agua que se llevan el líquido para entregarlo a clientes cautivos, trajinan todo el día por las calles, lo que representa para los pobladores un dolor de cabeza adicional, ya que son tantas unidades de enormes dimensiones que transitan por la zona que provocan problemas de tráfico y movilidad, mientras que algunas vías están prácticamente destrozadas por el peso de los vehículos.

Idelfonso Castañeda, otro de los fundadores de la Asociación Civil que rige en teoría el organismo de agua de Tulpetlac, explicó que de entrada el actual comité que administra el sistema encabezado por Francisco Oliva fue electo mediante el registro de planillas (cómo ha venido ocurriendo en los últimos lustros), y no por el voto a mano alzada de la llamada “Asamblea General de Usuarios” como establece el ordenamiento en su Capítulo Segundo, artículo 134.

Aseguraron que la elección de este comité realizado en octubre del 2019, en realidad se trato de una “imposición violenta” por parte de una facción del mismo grupo que ya controlaba la administración del agua, además de que se registraron choques y la infiltración de grupos que amedrentaron a la población, o en algunos casos la coptaron mediante extorsiones, promesas o reducciones de adeudos.

Mencionaron que antes de la llegada de la actual administración municipal que encabeza el morenista Fernando Vilchis, el problema de la venta de agua mediante pipas y tandeos bajo tarifa, ya era grave. Ahora solo se ha agudizado, sostuvieron.

Aseguraron que a nivel municipal existen regidores que apoyan al comité y los controlan desde el ayuntamiento, sin embargo el área de comunicación social del gobierno municipal de Ecatepec desligó a la administración local de cualquier responsabilidad e insistió en que el organismo es “autónomo” y no tienen ninguna injerencia ni en la elección de sus integrantes, ni en los negocios que realizan con la venta de agua en pipas.

El artículo tercero del capítulo primero de los estatutos de la administración del sistema de agua potable de Tulpetlac, indica textualmente: “La finalidad de esta asociación y del sistema de distribución de agua que administra, es proporcionar a la población mediante contrato el servicio a domicilio del agua potable, esto en coordinación con el H. Ayuntamiento Municipal quien por Ley es a quien corresponde proporcionarlo y administrarlo, pero que por respeto a que el pueblo construyó el sistema con su propio esfuerzo, le permite administrarlo de forma autónoma”.

A pesar de ello, la realidad es que los habitantes del pueblo de Tulpetlac y sus 22 colonias están a su suerte en medio de esta pandemia, sin acceder al vital líquido para mantener las mínimas condiciones de sanidad (lavado de baño y desinfección constante de espacios), para protegerse del coronavirus.

Idelfonso Castañeda, refirió que en medio de la mortal pandemia y justo en el municipio mexiquense con más casos positivos de SARS-Cov-2, al 90% de la población le representa un gran esfuerzo pero sobre todo dinero, mantener las medidas sanitarias para protegerse de contagios, ya que disponer de agua ahora es una cuestión de disponer de dinero.

Hasta este domingo y de acuerdo con estadísticas oficiales Ecatepec arribó a los 12 mil 046 casos confirmados de Covid-19 y presenta la mayor cantidad de defunciones, con mil 338 hasta este domingo.

Gina habla de su pesadilla:

“Tener que estar cachando el agua en la madrugada para llenar unas cuantas cubetas, esperar hasta dos, tres semanas o más para que ver si la echan, pero sin saber a ciencia cierta a qué horas y eso sí, ver pasar las pipas día y noche, las 24 horas, llevándose nuestra agua a quien sabe dónde mientras nosotros no tenemos ni para lavarnos las manos en esta pandemia”.

Idelfonso remata: “Es cómo el perro hambriento afuera de la carnicería pero no puede comer… así nosotros, solo vemos que las pipas pasan repletas llevándose nuestra agua”.

ESTATUTOS “FLORERO”

Los “Estatutos de la Administración del Sistema de Agua Potable de Tulpetlac, Estado de México”, fueron diseñados en la década de los 90´s por pobladores originarios que intentaron mediante una asociación civil, dejar reglas claras y justas que les garantizaran el vital líquido a sus generaciones.

El documento, cuya copia obtuvo este portal, señala puntualmente los propósitos de el organismo de agua de Tulpetlac: dotar de agua a la población; la forma en que deben operar y cómo deben ser elegidos sus integrantes.

Hoy esos estatutos, son estatutos florero… nadie los cumple.

Por ejemplo, en su artículo sexto los estatutos indica que que “en caso de haber ganancias estas se destinaran íntegramente a obras de beneficio colectivo en el pueblo fundador”, mientras que el artículo octavo, indica textualmente que “los ingresos en dinero se destinarán al mantenimiento y mejoramiento del servicio y en el caso de haber remanentes se aplicarán a la realización de obras de beneficio colectivo”.

El capítulo segundo señala como autoridad máxima para la designación de la administración del organismo a la “asamblea general” y que la elección debe ser por voto directo de los “usuarios del pueblo fundador”. Actualmente sin embargo, la elección se da mediante el registro de planillas, no obstante la sola palabra “Planillas”, no es mencionada una sola vez en el documento reglamentario.

También refiere que es motivo de expulsión de sus integrantes, el por ejemplo (artículo 81, fracción dos), que se disponga irregularmente de los recursos materiales o económicos del sistema…

Todo parece indicar que hay muchos quienes deben rendir cuentas.

LAS VENTAS

Antonio Muñoz, otro integrante del “pueblo fundador” que dio vida al organismo, aseguró que la administración actual del sistema, como la anterior y la anterior (así hasta los últimos 15 años), no han dado cuenta a quién o quienes se entrega el agua y a donde va a parar el recurso que se obtiene a cambio de la sed del pueblo de Tulpetlac.

Eso si, asegura, se tienen noticias que el organismo cuenta con al menos 15 clientes regulares, empresas grandes e instituciones como el IMSS e ISSEMYM; Viana y algunas otras firmas, a las que se les suministran pipas de agua completas, a razón de aproximadamente mil 200 pesos.

Pero la venta no es solo a empresas e instituciones, si ahora los ciudadanos de Tulpetlac quieren un tambo de agua, deberán pagar 200 pesos, ni más ni menos.

Por eso asegura Gina que en este contexto de escasez, saqueo, corrupción y pandemia, las familias de prácticamente la mitad de Ecatepec, se debaten entre comer o pagar el agua para no morir de covid19.

Ma. Teresa Montaño