Se trata de un proyecto innovador para la ciudad más importante del Estado de México, que propone, a partir de la paraestatal que fundó y opero por muchos años el profesor Carlos Hank, un organismo tipo PEMEX, pero pequeño, para construir todo tipo de obra pública en la capital, con recursos técnicos, materiales y humanos propios, e incluso con su propia maquinaria pesada.

¿Su costo de implementación?, 800 millones de pesos, pero sus ahorros de corto y mediano plazo, podrían promediar al menos mil millones anuales.

El presidente del Colegio de Arquitectos y Urbanistas del Estado de México, Arturo Chavarría Sánchez, presentó el ambicioso proyecto al cabildo de Toluca, y aunque de entrada para muchos se escuchó como “una locura”, ahora ha comenzado a estudiarse con lupa, pues además de innovador, traería importantes beneficios a la capital.

Entrevistado en su pequeña oficina del segundo piso del palacio municipal, el también edil –pues se estrenó además como regidor en enero pasado-, reconoció que el “provocador” proyecto fue inspirado en la constructora paraestatal que fundó y operó el profesor Hank durante su gobierno, logrando con ello, bajar costos, acelerar procesos de construcción y atender de forma directa y rápida la obra pública más urgente y necesaria para modernizar la entidad, desde escuelas y puentes, hasta avenidas y carreteras de alto impacto.

Refirió que al concluir el sexenio de Hank, la paraestatal fue poco a poco desmantelándose, hasta que fue desincorporada y sus recursos arrumbados y al final se perdieron o remataron, o se privatizaron, a fin de dar paso a la concesión de todo tipo de contratos constructivos, elevando así los costos y disparando el encarecimiento de la obra pública.

El modelo de la Constructora Municipal que propone ahora el onceavo regidor, parte de la suma de recursos que ya se tienen en varios departamentos –como maquinaria, ingenieros y materiales- encargados por ejemplo del bacheo de calles, arreglos a la infraestructura y atención a aspectos hidráulicos, por lo que se estima que solo se requerirían 800 millones de pesos para ponerla en marcha. El Organismo de Agua Potable estaría incorporándose a este nuevo ente público.

Arturo Chavarria indicó que por ello “no se partiría de cero”, y que la nueva paraestatal municipal, estaría a cargo de realizar proyectos –con personal especializado-, pero también de ejecutarlos, lo que podría reducir hasta en 300% en algunos casos, los costos de obras de alto impacto, pues actualmente, hasta los estudios de factibilidad son concesionados a empresas privadas, y este mecanismo adoptado desde hace más de 30 años, no solo ha encarecido los procesos constructivos de las obras, sino que consume gran parte de los recursos públicos, dijo.

Aseguró que la Constructora Municipal de Toluca, también atendería, por ejemplo, arreglos o construcciones de apoyo en escuelas públicas, puentes vehiculares, infraestructura deportiva, cultural, etcétera.

En los próximos días, el alcalde, Juan Rodolfo Sánchez Gómez y otros integrantes del cabildo, surgidos de Morena, analizaran este proyecto inspirado, paradojicamente, en un viejo jerarca priísta…