19 de octubre de 2020

En las ocho principales ciudades del Estado de México, la percepción de inseguridad empeoró durante la pandemia con niveles superiores al 80%, en Toluca por ejemplo la sensación de inseguridad entre la gente es masiva, al alcanzar un nuevo techo de 88.9%, mientras que los porcentajes de familias que sufrieron algún robo o extorsión entre marzo y septiembre en toda la entidad, se ubican entre los más altos de todo el país, incluidos nuevamente los indicadores de Toluca, Ecatepec, Izcalli y Neza.

La Encuesta Nacional de Seguridad Urbana (ENSU), dada a conocer por el INEGI arrojó datos reveladores tras no haberse publicado en el segundo trimestre del 2020 debido a la pandemia por COVID-19 en el mundo, la cual pese a lo que se esperaba, no impacto en algunas ciudades en materia de inseguridad. No hubo mejora.

En Toluca, donde gobierna el expanista-morenista, Juan Rodolfo Sánchez Gómez, pese a diversas estrategias millonarias para mejorar la seguridad en la capital (como la renta de cientos de patrullas y contratación de cientos de cadetes -despedidos en mayo pasado, en plena pandemia-), la inseguridad en la capital mexiquense empeoró.

El ENSU revela que la percepción de inseguridad en Toluca pasó de 88.4% a 88.9% entre marzo y septiembre de este año, aunque en septiembre del 2019, este indicador andaba en 84.7%, lo que significa que en un año la percepción de inseguridad en la capital aumento 4 puntos porcentuales y dos décimos de punto.

En cuanto al porcentaje de familias con algún integrante que sufrió robo o extorsión entre enero y junio pasado (la parte más álgida de la pandemia), fue de 26.8%. Es decir que de cada 100 familias en la capital mexiquense, 27 (en cifras cerradas), sufrió alguno de esos delitos.

Cabe recordar que la administración de Juan Rodolfo Sánchez Gómez contrató 400 patrullas por 28 meses en contratos que suman los 480 millones de pesos, pese a lo cual fue el único municipio que no mejoró su percepción de inseguridad ni siquiera un décimo, como si ocurrió en las otras siete ciudades mexiquenses monitoreadas en esta encuesta por el INEGI.

En el caso de Ecatepec, la percepción de inseguridad bajo 2.4 puntos porcentuales, aunque es la más alta a nivel estatal, al pasar de 94.4% en marzo a 92.8% en septiembre pasado; en tanto que el porcentaje de familias de esa localidad que han sufrido en el primer semestre algún robo o extorsión se ubica en 31.3%. Ecatepec es gobernado por el morenista Fernando Vilchis Contreras.

Por su parte Nezahualcóyotl, gobernado por el perredista Hugo de la Rosa, tuvo un mejor desempeño al bajar la percepción de inseguridad durante la pandemia de 78.1% a 70.8%, mientras que el porcentaje de hogares de Neza que sufrieron algún robo o extorsión entre enero y junio se ubicó en 30.8%.

En Naucalpan gobernado por la expanista Patricia Durán, hoy amparada por Morena, tuvo una mejora de medio punto porcentual en la percepción de inseguridad al pasar de 88.5% a 88%, mientras que ahí solo 18.7% de las familiares reportan algún tipo de extorsión o asaltos, mucho menor que en las otras ciudades mexiquenses.

También en Tlalnepantla, la percepción de inseguridad mejoró ligeramente de acuerdo al ENSU del INEGI, al pasar de 82.6% en marzo a 82.0%, con 24.5% de las familias que han sufrido algún tipo de extorsión o robo.

Pero quizás sin duda el mejor despeño durante la pandemia lo tuvo Atizapán de Zaragoza, donde la percepción de inseguridad pasó de 81.3% a 65.7%, mientras que, sin embargo, el 29.4% de las familias atizapenses reportó haber sufrido algún robo o extorsión entre sus integrantes, durante el primer semestre del año. Ahí gobierna Ruth Olvera.

El municipio de Chimalhuacán también se incluyó en la ENSU. Sus puntajes son mejores que Toluca, aunque no significativos, con una percepción en la inseguridad que pasó de 82.4% a 81.6% y con un 27.7% de familias que sufrieron alguna extorsión o robo en el primer semestre; mientras que Cuautitlán Izcalli, también tuvo una mejora, al retroceder cuatro puntos porcentuales la percepción de inseguridad, pues pasó de 87.7% a 83.3% , aunque 34% de sus familias reportó haber sufrido entre enero y junio, algún robo o extorsión.



Ma. Teresa Montaño