5 de febrero de 2021

Expertos en filosofía, ética y leyes, analizaron las ventajas y debilidades que presenta la denominada “Guía Ética” lanzada por el presidente Andrés Manuel López Obrador en noviembre pasado, en un esfuerzo por educar a la población en valores y virtudes que reviertan los esquemas de corrupción, violencia y otros males en que está sumido México y su clase política.

En el foro organizado por la Facultad de Derecho y denominado “De la Constitución Moral a la Guía Ética”, se destacaron como elementos negativos del documento, el uso de valores con sesgos religiosos -provenientes particularmente del cristianismo-, que se pretenderían imponer de manera generalizada, pasando por alto la gran riqueza multicultural y diversidad de los mexicanos, tanto de principios, como de valores y visiones frente al mundo y a las problemáticas, aunque también se rescató este esfuerzo como “un buen principio”, para intentar combatir y corregir la decadencia que presenta México en diversos ámbitos, particularmente en temas de corrupción.

El primero en participar en esta discusión virtual que congregó expertos en derecho, alumnos y estudiosos de diversas disciplinas, fue el Doctor Oscar Diego, quien consideró la Constitución Ética del gobierno federal, como una “estrategia fallida”, ya que desde su génesis, por ejemplo, se planteo realizar consultas y foros dirigidos a diversos sectores de la población, pero que al final no se realizaron con lo cual la “Constitución Moral” que terminó como una "Guía Ética", se quedó corta respecto de las expectativas que había despertado.

Igualmente criticó el concepto de “Constitución” con que se planteaba en el proyecto inicial, ya que a ojos de otros expertos que participaron en la mesa y por ser un termino del ámbito jurídico, choca conceptualmente con su objetivo de inculcar valores y virtudes que recaen más bien en otras disciplinas, aunque sin negar de todo las conexiones entre la ciencia jurídica y otras disciplinas que le dan origen a esta, como la filosofía misma.

Para Oscar Diego tanto como para el Maestro en Derecho, Rafael Elizalde Castañeda, uno de los principales errores de la Guía Ética para la Transformación de México, es su cercanía con principios religiosos, que desde sus respectivos puntos de vista se pretenden imponer en tono imperativo, lo que resulta hasta cierto punto un riesgo, señalaron, de caer en actitudes intolerantes o discriminatorias.

Esta conclusión es similar a uno de los principales argumentos planteados por el profesor y doctor en filosofía, Jaime Rodríguez Alva, de la Universidad de Córdoba, España, en el sentido de que la Constitución Moral de AMLO, desde un estudio crítico y un análisis axiológico, no solo se alude como una “metáfora” de lo deseable, pero con un uso de lenguaje imperativo y hasta con sentido inductivo y paternalista (en alusión a aquella alegoría del pastor que guía a su rebaño).

Refirió que no obstante, mientras ensalza algunos valores como la “fraternidad”, deja de lado otros valores ligados a la individualidad que promulgan otras corrientes de filosofía políticas de tradición liberal, tales como la libertad misma y la pluralidad, los cuales al ya existir en la sociedad, dijo, deben ser respetados.

Rodríguez Alva, apuntó además algunos “valores” que están totalmente ausentes de la “Constitución Moral” de AMLO, en este caso destaco los siguientes: la tolerancia (entendidos como la identidad frente a la diferencia), valores de gestión pública cómo neutralidad, colaboración, rendición de cuentas, eficacia, transparencia, participación. “Es más -agregó-, valores como el amor pueden reñir con otros como la neutralidad, por ejemplo”.

En el documento, también destacan por su ausencia, señaló el experto, valores asociados a virtudes cívicas, como la razonabilidad, prudencia y deliberación.

Pero Rodríguez Alva incluso fue más lejos, destacó la “desconfianza”, como un valor ausente de la Constitución Moral de AMLO -así fue citada por la mayoría de expertos aunque se trata de la Guía Ética para la Transformación de México-, en el sentido de que, de acuerdo a nuevas perspectivas, se trata de “un valor que en equilibrio con la confianza, permite mecanismos de control social y democrático”.

En su turno la investigadora y catedrática de la UAEMex, Luz María Gómez Ordoñez, hizo un análisis de la forma en que se comunica al público la Guía Ética

Tras analizar y traer a la mesa conceptos básicos sobre el surgimiento de la idea de las" virtudes" desde Platón y Cicerón, destacó que si bien se trata de un documento que aborda los conceptos y valores de manera sencilla, al final de cuentas los comunica bien, pues se dirige a amplios públicos en lenguaje sencillo y accesible para la gente, que no necesariamente tienen que ser expertos en filosofía, puntualizó.

La maestra, quien también es una destacada activista en Toluca, reconoció que pese a sus posibles carencias, la Guía Ética constituye en si misma “un buen principio” para impulsar cambios.

En este sentido Gómez Ordóñez no dejó destacar los indicadores que colocan a México como uno de los países más corruptos del mundo, debido a ello estimo que la Constitución Ética de AMLO es un buen inicio, aunado a cambios que se están impulsando en el combate a la corrupción, pese a que en los estados del país, esto aún no se replica.

El foro fue presentado por el director de la Facultad de Derecho, Dolores Alanís y contó con la participación de alumnos y académicos de la institución.

Durante el evento, algunos participantes, como el Maestro de la factual, Eric Bravo, cuestionó ¿Cuál perfil moral o ético debe tener, en este contexto el próximo rector o rectora al frente de la Uaemex?, a lo que los especialistas coincidieron que debe contar con altos estándares profesionales, de calidad humana, académica y probada incorruptibilidad.

https://www.facebook.com/watch/live/?v=715710345794837

https://lopezobrador.org.mx/wp-content/uploads/2020/11/GUIA-ETICA-PARA-LA-TRANSFORMACION-DE-MEXICO.pdf

Ma. Teresa Montaño